En esta ocasión los sujetos de estudio son los habitantes de las 168 viviendas construidas en 1953 por el Institut de l’Habitatge en el Passeig Calvell del Poblenou, conocidas popularmente como los “Tupolevs”.
El contacto con los vecinos que han querido participar en el proyecto y la cartografía de su situación sugieren que la prioridad de intervención pasa por formalizar y consolidar una única comunidad que les permita tomar conciencia de lo que han sido y lo que son.
Los Tupolevs son protagonistas de una situación sobrevenida. Cuando fueron construidos se encontraban rodeados de infraestructuras infranqueables y tejido industrial. Hoy, gracias a las mejoras realizadas en su entorno urbano inmediato, están mutando de su condición de vivienda social hacia un producto de mercado demasiado atractivo para los operadores de pisos turísticos. Solamente desde la búsqueda de un equilibrio entre los nuevos y viejos habitantes se conseguirán abordar como objeto habitable también necesitan.
Si existe acuerdo entre los sujetos se puede mejorar el objeto.
En este contexto, decidimos dividir a los alumnos en 8 grupos, cada uno de ellos encargado de un Tupolev, con el objetivo de contactar con el máximo número posible de vecinos que colaboren en el proyecto e iniciar el estudio de cada uno de sus casos particulares.
Finalmente, rememorando las antaño cenas al fresco que realizaban los vecinos de los Tupolev en sus primeros años, allá cuando todos se conocían y formaban comunidad, se decice presentar el trabajo en un acto que los involucre de igual manera. Una jornada festiva, con mobiliario temporal que domestique el espacio urbano entre los bloques, y permita que los vecinos se conozcan y reúnan otra vez entorno a una buena fideuá.